¿Por qué toda empresa creativa necesita manuales y capacitaciones sobre propiedad intelectual?
Cuando una empresa tiene varias marcas, subproductos, campañas o servicios bajo un mismo techo, es común que el equipo legal diga una cosa, el equipo de diseño otra y el comercial actúe por su cuenta.
Y no es por mala intención, es por falta de alineación.
Este artículo propone una solución práctica: crear un sistema de gestión de marcas compartidas, donde se alinean branding, legal y estrategia comercial para evitar conflictos y potenciar el negocio.
¿Qué es una marca compartida?
Es aquella que:
Se utiliza por distintas áreas o unidades de negocio.
Se gestiona por varias personas o equipos (comunicación, legal, ventas).
Aplica a más de un servicio, producto o evento.
Está expuesta al público desde múltiples canales.
¿Qué riesgos hay si no se gestiona bien?
Registro incompleto o en nombre incorrecto.
Pérdida de derechos por mal uso o abandono.
Confusión interna sobre los términos de uso.
Uso indebido por personas sin autorización.
Dificultad para vender o licenciar la marca a futuro.
Daño a la reputación por mal manejo visual o comercial.
¿Cómo alinear branding, legal y estrategia comercial?
1. Mapa de marcas internas
Identifica todas las marcas o signos distintivos que usa tu organización:
Marcas principales y secundarias.
Submarcas (productos, talleres, campañas).
Nombres de eventos, metodologías, logotipos.
2. Definir titularidad y licencias
No todo lo que se crea pertenece automáticamente a la empresa.
Define qué marcas están registradas, en qué nombre, y qué áreas pueden usarlas.
Puedes usar:
Contratos de cesión interna.
Licencias de uso entre departamentos.
Acuerdos de confidencialidad para uso creativo.
3. Manual de uso legal-comercial de marcas
Un documento interno que indique:
Qué marcas existen y quién las puede usar.
En qué canales y con qué límites.
Qué hacer si se quiere crear una nueva submarca.
Cómo se protege y se representa legalmente.
4. Capacitación cruzada entre áreas
Organiza sesiones donde branding, comercial y legal hablen entre sí.
Algunas preguntas clave:
¿Qué está registrado y qué no?
¿Qué marca puede usar el equipo comercial sin pedir permiso?
¿Cómo protegemos nuestra metodología si la publicamos?
¿Qué pasa si un socio se va con la marca en su portafolio?
¿Qué aporta esta alineación?
Claridad de responsabilidades.
Reducción de riesgos legales.
Mejora en la imagen y reputación de la marca.
Facilita el escalamiento, la venta o la franquicia.
Profesionaliza el uso del branding como activo estratégico.
¿Qué puede hacer bucle® por tu empresa?
Auditar tus marcas internas.
Proponer estructuras de propiedad legal.
Redactar manuales, contratos y licencias.
Capacitar a tus equipos para usar las marcas de forma alineada, creativa y segura.
Conclusión
Una marca no solo se diseña: se gestiona, se protege y se alinea.
Cuando branding, legal y comercial caminan juntos, la marca crece con estructura y claridad.
Y eso, en el mundo creativo, es tan importante como el diseño mismo.
Por Mónica Lisette Rayas Ortiz
Mtra. en Derecho Comercial y de la Empresa | Más de 10 años registrando marcas y asesorando en Propiedad Intelectual | Consultora Estratégica de Negocios en bucle® | Psicoanalista individual y de grupos |
